Rubén Cedeño, erudito esotérico venezolano, trasciende lo convencional con su profunda sabiduría en metafísica. Su obra ilumina senderos de espiritualidad y conocimiento, inspirando a almas en busca de elevación y verdad.
El 28 de Diciembre se celebra el Día de los Inocentes, en que cientos de niños fueron matados inocentemente, sin saber por qué, ya que Herodes buscaba al Cristo para matarlo y no lo destronara a el. Eso existe, por muy positivo que seas, si no estas alertas, no te cuidas, no usas tus protecciones puedes “morir por inocente”.
La Ley de la Ascensión trabaja con el Rayo Blanco. Una afirmación totalmente mágica, que la evoca y sintetiza su actividad es: Yo Soy la Resurrección y la Vida; esta afirmación induce a salir del estancamiento, la muerte y resucitar; es activar la pureza, la belleza, la resurrección y el arte.
La palabra metafisica se utiliza para referirse a esta enseñanza contenida en los libros de Conny Méndez y los de mi autoría, por una cuestión de decisión que hizo mi maestra Conny Mendez para identificar los libritos que escribía y las charlas que daba en la caracas de los años sesenta.
Erróneamente se suele llamar esoteristas a los tarotistas, astrólogos, clarividentes y esto es un grave desacierto. También ha sucedido que algunos pseudo-esotéricos que por ser poseedores de algo del conocimiento oculto…
Conny Méndez, cada vez que llegaba de viaje, venía con una enseñanza nueva, una historia distinta y algo diferente, que después ella misma olvidaba o cambiaba. Una vez llegó Conny de Miami con una historia.
De Venezuela se han dicho predicciones muy buenas, tal vez únicas, se crea o no en ellas. Son veintinueve millones de personas que tienen que aprender determinadas lecciones y lo están haciendo. Esto como nación le dará a Venezuela en un futuro, aquilatamiento, conciencia, sabiduría y muchas virtudes mas.
Al concluir un periodo marcado por el miedo al fin del mundo, las enseñanzas de Rubén Cedeño resaltan la importancia de adoptar una perspectiva constructiva.
