Somatización y Biodescodificación

Somatización y Biodescodificación, InfoMistico.com

La somatización es un fenómeno que muchos experimentamos sin darnos cuenta. Se trata de la expresión física del malestar psicológico y es posible que conozcas algún caso o incluso lo hayas vivido en carne propia. Los dolores y malestares físicos que se presentan sin una explicación médica identificable son más comunes de lo que pensamos y afectan significativamente la calidad de vida de quienes los padecen.

Entendiendo la somatización en Biodescodificación

En el ámbito de la biodescodificación, somatizar se refiere a cómo nuestras emociones y conflictos internos se manifiestan físicamente. Mairena Vázquez, psicóloga especializada en este campo, nos explica que algunas personas son más propensas a tener problemas de somatización debido a su predisposición emocional y a sus experiencias de vida. Los síntomas más frecuentes incluyen dolores de cabeza, problemas digestivos y otros malestares físicos que no tienen una causa médica aparente.

¿Qué es la somatización?

Juvenalis decía: “la salud mental y la física van siempre de la mano”. La Real Academia Española define somatizar como transformar problemas psíquicos en síntomas orgánicos de manera involuntaria. En otras palabras, es cuando el cuerpo expresa lo que la mente no puede procesar adecuadamente.

Enfermedades psicosomáticas

Las enfermedades psicosomáticas son aquellas en las que el estrés, los problemas emocionales o las emociones negativas se manifiestan como síntomas físicos. En nuestra vida cotidiana, el estrés es una constante. Vivimos en un mundo acelerado, lleno de presiones laborales y familiares, lo que a menudo nos lleva a experimentar altos niveles de ansiedad, depresión y otros problemas emocionales.

Estas emociones negativas (rencor, celos, envidia, etc.) causan una serie de síntomas físicos como dolores de abdomen, cefaleas, náuseas, vómitos y problemas gastrointestinales, afectando nuestro desempeño laboral y nuestras relaciones sociales.

Ejemplo de Somatización

Para ilustrar cómo funciona la somatización, pongámonos en la piel de Juan. Juan ha estado experimentando dolores de estómago, diarreas y gases, especialmente durante periodos de mucho estrés en su vida laboral y familiar. Trabaja largas horas para mantener a su familia y su situación familiar es tensa debido a constantes peleas con sus hermanos y padres. Esta acumulación de estrés y emociones negativas lo lleva a somatizar sus problemas emocionales en forma de síntomas físicos.

Cuando las emociones no pueden ser expresadas, son somatizadas

Las emociones que no podemos expresar de manera saludable tienden a manifestarse físicamente. Cada persona tiene puntos más débiles en su cuerpo, y es allí donde la tensión se acumula. El cuerpo se encarga de expresar las emociones que sentimos, y cuando no podemos liberarlas adecuadamente, se somatizan.

Esto significa que el conflicto psicológico se transfiere al cuerpo, permitiendo una resolución sin sufrimiento psíquico. Sin embargo, muchas personas tienen dificultad para aceptar que su mente es la que genera estos síntomas, lo que complica aún más el tratamiento cuando son diagnosticadas y tratadas únicamente con fármacos, sin considerar el papel crucial de la psicoterapia.

Los fármacos y la dependencia

El uso de fármacos (analgésicos, sedantes, etc.) para tratar los síntomas de somatización puede generar dependencia y, en algunos casos, agravar el problema. Es fundamental entender que los medicamentos pueden aliviar temporalmente los síntomas, pero no abordan la raíz del conflicto emocional o psicológico.

Roberto Salazar, un médico especializado, advierte que escuchar las valoraciones médicas sin un entendimiento adecuado puede llevar a somatizar aún más los síntomas. Las personas comienzan a preocuparse y sienten que su organismo está en riesgo, aunque la realidad es que la probabilidad de enfermar es baja.

Tratamiento para la somatización

El tratamiento para la somatización debe ser integral, abarcando tanto el aspecto psicológico como el físico. La biodescodificación ofrece una perspectiva valiosa, ya que se enfoca en identificar y resolver los conflictos emocionales que están detrás de los síntomas físicos. Mairena Vázquez sugiere algunas claves para evitar somatizar:

  1. Reconocimiento de las emociones: ser consciente de nuestras emociones y no reprimirlas.
  2. Expresión adecuada: encontrar maneras saludables de expresar lo que sentimos, como hablar con un amigo, practicar un deporte o realizar actividades creativas.
  3. Terapia psicológica: buscar apoyo profesional para trabajar en los conflictos emocionales y aprender técnicas de manejo del estrés.
  4. Autocuidado: mantener una rutina de autocuidado que incluya una alimentación balanceada, ejercicio regular y técnicas de relajación como la meditación o el yoga.

La conexión mente-cuerpo

Entender la conexión entre la mente y el cuerpo es fundamental para abordar la somatización de manera efectiva. La salud mental y física están intrínsecamente ligadas, y cuidar de una implica cuidar de la otra. Es crucial que las personas tomen conciencia de esta relación y busquen tratamientos que consideren ambos aspectos. La somatización no es simplemente un problema de salud mental, sino una manifestación de cómo nuestros pensamientos y emociones afectan nuestro bienestar físico.

En resumen, somatizar es una forma en que nuestro cuerpo nos habla cuando nuestra mente está sobrecargada. Escuchar estos mensajes y abordarlos con una perspectiva holística puede mejorar significativamente nuestra calidad de vida. La biodescodificación nos ofrece herramientas valiosas para entender y tratar estos problemas, recordándonos siempre que la salud comienza en la mente.


Con información de CogniFit Metodología y referencias científicas