En el susurro del tiempo, la arqueología desentraña misterios sepultados bajo tierra, revelando secretos ancestrales. Cada hallazgo, un eco de civilizaciones olvidadas, invita a un viaje místico por historias ocultas, guiando nuestras almas hacia el entendimiento de la eternidad.
Se le conoce como la Señora de Cao y estaba enterrada con una corona y rodeada de objetos de oro y cobre en la pirámide de Huaca Cao Viejo, cerca de la ciudad de Trujillo. La tumba también contenía algunas armas, incluyendo dos enormes garrotes de guerra.
Según creen los expertos, la cripta fue construida por el arzobispo Georgios, un poderoso líder religioso en Makuria. Las misteriosas inscripciones en las paredes de la cripta, están escritas con tinta de color negra en una capa delgada de cal y utilizaron los idiomas griego y en copto.
Bodh Gaya, donde recibió la iluminación y pasó a ser Buda; Sarnath, donde predicó por primera vez; y Kusinagara, donde murió. Se dice que en el momento de morir, a los ochenta años de edad, Buda recomendó a todos sus discípulos que visitaran Lumbini.
Los arqueólogos de la Autoridad de Antigüedades de Israel han descubierto una tablilla de plomo con una maldición, probablemente escrita por un mago de 1.700 años de antigüedad, en una mansión romana que colapsó recientemente en la Ciudad de David de Jerusalén.
El hombre enterrado en vida tenía entre 35 y 40 años. Las monedas de bronce que encontramos entre sus dientes muestran el periodo en el que vivió. Tenía un arado de hierro clavado en la parte izquierda de su torso, entre el cuello y el pecho
Un pintoresco pueblo en el centro de India ha impulsado un debate en Facebook con antiguas huellas de pies, y una imagen grabada de un objeto volador misterioso. En el pueblo de Piska Nagri, a las afueras de la ciudad del Estado de Ranchi Jharkahnd.
Arqueólogos han descubierto lo que podría ser la tumba de Alejandro Magno en un sitio cerca de la Anfípolis, fue una ciudad griega de la Antigüedad, en Macedonia oriental. El rey guerrero de la antigua Macedonia gobernaba en el siglo IV a.C., pero se pensaba que había sido enterrado en Egipto.
