Operarse las líneas de las manos

Operarse las líneas de las manos, InfoMistico.com

La intervención la realiza Takaaki Matsuoka en la clínica de belleza Shonan. Con la intención de cambiar el destino, el cirujano japonés Takaaki Matsuoka realiza, desde el 2011, la peculiar intervención en las líneas de las palmas de las manos de sus pacientes.

¿Te operarías las líneas de las manos para cambiar tu destino?

El médico le reveló al diario The Daily Beast que todo inició cuando, en 2011, una paciente le pidió que le realizara este procedimiento, porque quería cambiar su suerte.

Según Matsuoka, la cirugía es más cotidiana en Corea del Sur de lo que se conoce. Por la primera intervención cobró 1.000 de dólares. Desde entonces ya ha realizado por lo menos 37 cirugías.

—Si se intenta crear una línea en la palma de la mano con un láser, va a curarse, y no va a dejar una marca clara.

Bisturí eléctrico

Hay que usar el bisturí eléctrico y hacer una incisión temblorosa a propósito, porque las líneas de la palma no son completamente rectas. Si no se quema la piel y solo se utiliza un bisturí normal, las líneas no se formarán-, explicó el experto, quien agregó que la operación suele durar entre 10 y 15 minutos.

Generalmente los hombres buscan cambiar las líneas relacionadas con el dinero, mientras que las mujeres aquellas que tienen que ver con el matrimonio.

—Si no tiene la línea de matrimonio, significa que es muy improbable que se case. Así que el trabajo del médico es crear dicha línea-, indicó.

El médico es consciente que no es seguro que la cirugía realmente tenga los efectos que el paciente espera, pero reveló que una paciente a la cual le diseñó la línea de la boda temprana le escribió para contarle que se casó poco después de haber realizado la operación y dos pacientes del sexo masculino le relataron que habían ganado la lotería después de la cirugía.

Análisis de las manos y palmas

Operarse las líneas de las manos, InfoMistico.com
Si se intenta crear una línea en la palma de la mano con un láser, va a curarse, y no va a dejar una marca clara..

El Espectador de Colombia

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