Deudas Kármicas

Deudas Kármicas, InfoMistico.com

Atraviesas una secuencia de circunstancias difíciles en las que pagas todas tus deudas Kármica antes de «despertar» y ser iluminado. El karma es una ley universal que asegura que todos nuestros actos de vidas pasadas se equilibren.

¿Cómo se pueden saldar las deudas kármicas?

El propósito que tiene -que es generar circunstancias en las que el alma pueda crecer y avanzar- no es, como algunos creen, infligir un castigo. En otras palabras, el karma funciona para nuestro aprendizaje.

El humano encuentra su evolución y «despierta» entre tantas mentiras, descubriendo la grandeza de su existencia, y se convierte en un Ser Iluminado cuando el alma completa su aprendizaje, a través de todas las vidas que ha tenido y experimentando todas las condiciones posibles.

Hace falta algo más que sufrimiento para saldar las deudas kármicas

Sin embargo, cuando realmente interiorizamos la lección que nos proponemos aprender.

Por ello, algunas personas sufren continuamente la misma terrible suerte, creyendo que es el resultado de su mala suerte. Todo sucede por una razón, y siempre hay un proceso de aprendizaje oculto, que es crucial comprender.

Las experiencias desafiantes que hemos tenido son precisamente las que nos revelan de alguna manera las cosas malas que hemos hecho en nuestro interior. Además, hay maestros disfrazados que nos visitan para recordarnos las malas acciones que aún no hemos enmendado o rectificado.

El punto crucial es que, si aceptamos la hipótesis de que es probable que nuestros problemas actuales tengan sus raíces en vidas anteriores, entonces podemos concluir que hemos seleccionado nuestra situación actual para abordar esas cuestiones.

Retribución kármica

Muchas personas cometen el error de pensar que al reconocer sus circunstancias difíciles como una herencia kármica, se han ganado la mala suerte que les ha caído.

Estas personas razonan que, como hicieron algo terrible en el pasado y fueron malvados, ahora tienen que soportar una retribución kármica. Como resultado, pueden experimentar una intensa vergüenza y resignación kármica.

El dolor es causado por el karma

Irónicamente, la causa kármica de la miseria en la vida presente no es, con frecuencia, un acto espantoso del pasado, sino una emoción culpable que no se justifica en la entrega excesiva al sufrimiento personal.

Trabajar con la reencarnación de forma constructiva implica ver las situaciones difíciles -o cualquier tipo de situación- como oportunidades para arreglar problemas que pueden haber persistido durante un periodo muy largo.

Trabajar con la reencarnación es similar a lidiar con el karma dentro de una vida, que normalmente está relacionado con el aprendizaje de una lección: ¿Es posible elegir, consciente o inconscientemente, resolver un problema?

Cuando algo se hace conscientemente, suele ir mucho más rápido. Por ejemplo, si somos conscientes de la reencarnación, no tenemos que esperar cientos de años para abordar un problema que solo está presente en nuestra mente subconsciente; en cambio, podemos elegir ser conscientes de él y abordarlo.

A veces, todo lo que se necesita para resolver un problema es darse cuenta de que podría ser de naturaleza kármica; esto disipa el misterio y aclara cualquier confusión, dejando a uno libre para abordar la cuestión desde un punto de vista práctico.

En lugar de describir el problema como algo extraño, sin causa aparente, podemos decir simplemente que parece tener sus raíces en una vida anterior.

Conexiones kármicas

Son deudas que acumulamos de relaciones o vidas pasadas con personas con las que no actuamos de acuerdo con las reglas divinas, y las lecciones más importantes a impartir y aprender son amar y perdonar.

Nuestra alma elige con quién se va a encontrar de nuevo antes de nacer para que podamos rectificar el daño que les causamos y avanzar espiritualmente.

Nuestra pareja, así como nuestros padres, hermanos e incluso colegas o compañeros de trabajo, pueden ser objeto de estas deudas kármicas.

Cualquier noción preconcebida de que el KARMA es algo que hay que cargar o que hay que manejar de forma dolorosa, o que la herencia kármica es irrevocable, es insuficiente o inexacta.

Maestros disfrazados

Las personas con las que más problemas tenemos en esta vida son los maestros disfrazados.

Ya sea un amigo, un familiar o un jefe, estas personas suelen hacerte la vida muy desagradable. A menudo te preguntarás por qué lo hacen, y es entonces cuando necesitas comprender la ley del karma. Esta persona viene a mostrarte algo de una vida anterior que aún no has resuelto o pagado.

Es posible que esta persona te esté maltratando, pero la solución no es aceptarlo y dejar que la persona pague tu deuda kármica; más bien, la solución es que busques la causa raíz de este patrón doloroso o molesto y utilices el perdón y el amor inquebrantable para resolverlo.

A menudo ocurre que empiezas a producir lo que se conoce como Dharma en el momento en que empiezas a dar a este individuo sin esperar nada a cambio.

Registros Akáshicos y deudas kármicas

Existen terapias en las que una persona profesional y debidamente formada en estas especialidades puede abrir tus registros de vidas pasadas y darte una explicación detallada de lo que has llegado a pactar en esta vida con determinadas personas o situaciones concretas.

Estas terapias incluyen los Registros Akáshicos, regresiones a vidas pasadas, oraciones para transmutar el karma, etc.

Hay otros métodos para cumplir con tu karma sin tener que soportar el dolor, pero hay algunas situaciones que no podrás superar a menos que las aprendas y perdones a todos los involucrados, incluido tú mismo…