Espiritualidad y Dinero

Ser pobre no es un requisito para ganarse el respeto, simpatía ni la admiración de DIOS, ni comprar a cuotas de sacrificio, lucha, sufrimiento, necesidad y carencia un lugar seguro en el cielo. Al contrario es una blasfemia no prosperar e irnos de este mundo y no dejarlo mejor de como lo encontramos.