La creencia en lo paranormal: ¿Percepción o probabilidad?

La creencia en lo paranormal: ¿Percepción o probabilidad?, InfoMistico.com

La resolución del misterio ha llegado, poniendo fin a las creencias en fantasmas, telekinesis, horóscopos y deidades. La ciencia, una vez más, sorprende al mundo y lo hace menos misterioso.

Desmitificando lo paranormal

La ciencia detrás de los fenómenos sobrenaturales

A pesar de los avances científicos, aún existe una parte de la población que cree en fenómenos paranormales. Susan Blackmore, experta en el tema, ha compilado varios estudios que explican las razones detrás de esta creencia en lo inexistente. Según estos estudios, es común que subestimemos la probabilidad de los eventos que nos rodean, lo que puede llevarnos a creer en sucesos paranormales.

La creencia en lo paranormal

¿Una cuestión de percepción o de probabilidad?

Los casos paradigmáticos se extienden a todas las creencias, incluyendo aquellas de índole religiosa y las interpretaciones coincidentes en torno a los vaticinios y adivinaciones (como tarot, runas, borra del café, bolas de cristal, entre otros).

Los «psíquicos» logran presentar hechos que parecen estar relacionados con la vida de sus clientes, quienes juzgan estos hechos como más precisos que un simple acto de azar.

Sin embargo, la evidencia empírica muestra que esta creencia en lo paranormal es subestimada en términos de probabilidad, lo que produce un círculo creciente de credibilidad al suponer que lo que es cierto para uno mismo también lo es para los demás.

El error de apreciación de la probabilidad y la creencia en lo paranormal

El British Journal of Psychology publicó en 1997 el estudio «Probability Misjudgement and Belief in the Paranormal«, coordinado por Blackmore, considerado el estudio definitivo en esta materia.

Este trabajo fue llevado a cabo como parte de la Semana de la Ciencia y Tecnología Británica en 1994, y se presentó a través de un artículo en el periódico británico Daily Telegraph.

La publicación en cuestión consta de dos partes. La primera de ellas presenta diez afirmaciones relacionadas con residentes británicos de mediados de la década de 1990:

  • En mi familia hay alguien llamado Jack.
  • Tengo una lesión en la rodilla izquierda.
  • Anoche soñé con alguien que hace muchos años que no veo.
  • Viajo habitualmente en un coche blanco.
  • En una ocasión me rompí un brazo.
  • En este momento me duele la espalda.
  • Tengo dos hermanos.
  • Tengo un CD/cassette de «música acuática» de Händel.
  • Tengo un gato.
  • El año pasado estuve en Francia.

La segunda parte del artículo del Daily Telegraph incluía dos preguntas para los lectores:

  • ¿Cuántas respuestas verdaderas cree que obtendría si le hiciera estas diez preguntas a un desconocido en la calle?
  • ¿Cree usted en la percepción extrasensorial?

Se recibieron 6238 respuestas, con una tasa promedio de respuestas positivas superior al 25%. Aunque este número puede parecer elevado, desde una perspectiva probabilística es un valor esperado. Por ejemplo, ¿cuál crees que fue el porcentaje de respuestas positivas a la pregunta sobre la lesión en la rodilla?

La verdad detrás de las coincidencias

¿Qué nos dicen los números?

Efectivamente, el 34% de los encuestados respondió afirmativamente a la pregunta sobre la lesión en la rodilla, lo que equivale a más de un tercio de los participantes. Además, el 30% de ellos poseían la «Música Acuática» de Händel en su hogar, mientras que el 27% habían visitado Francia el año anterior y el 22% tenían un pariente llamado Jack.

Estos resultados sugieren que las coincidencias ocurren con más frecuencia de lo que comúnmente se cree.

Por otro lado, en respuesta a la primera pregunta de la encuesta, los participantes estimaron que las respuestas verdaderas se darían en alrededor del 36% de los casos. Esto indica que las personas tienden a sobreestimar su capacidad de discernir la verdad en situaciones similares.

Cómo las afirmaciones vagas influyen en la interpretación de los resultados de un estudio

El estudio también arrojó otro resultado interesante: los «creyentes» respondieron afirmativamente en más casos que los «no creyentes».

Se han planteado varias hipótesis para explicar esto, como que los «creyentes» llevan un estilo de vida diferente, por ejemplo, que es más probable que tengan un gato en casa. Sin embargo, la clave parece estar en la forma en que cada persona interpreta las afirmaciones.

Según el estudio, varias preguntas fueron redactadas de manera deliberadamente vaga para que se asemejaran lo más posible a las afirmaciones poco específicas hechas por los psíquicos. Los «creyentes» tienden a usar categorías más amplias cuando responden a estas preguntas, lo que puede explicar por qué más de ellos respondieron afirmativamente a la pregunta sobre tener un pariente llamado Jack, incluyendo a familiares lejanos en la categoría de «familiar».

En resumen, los resultados del estudio sugieren que las personas tienden a interpretar las afirmaciones vagas de manera amplia y que los «creyentes» tienen más probabilidades de hacerlo que los «no creyentes». Cada uno puede llegar a sus propias conclusiones al respecto.

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