El último encuentro de actual Papa con sus peregrinos será el próximo 27 de febrero, con un recorrido por la plaza de San Pedro. La fecha del cónclave será decidida por cardenales. La despedida del santo padre Joseph Ratzinger, la próxima semana, ha despertado euforia entre sus fieles.
27 de febrero 2013 – Despedida de Benedicto XVI
El Vaticano ya ha recibido solicitudes de 30.000 billetes de entrada para la zona de sillas que estarán ubicadas en la emblemática plaza de San Pedro. La capacidad del lugar de la ceremonia es sòlo de 10.000.
«El santo padre recorrerá la plaza de San Pedro en el papamóvil para que los peregrinos puedan verlo más de cerca», informó este jueves el vocero del Vaticano, Federico Lombardi. El recorrido comenzará a las 10:30.
Aunque este es el «único cambio» introducido al formato de la despedida, que será una audiencia general normal y no el de una liturgia de la palabra, es la última oportunidad de los fieles de ver al Papa en público con la investidura mayor de la Iglesia católica, que llevó durante casi ocho años.
La celebración del miércoles de ceniza estaba prevista en una pequeña iglesia de Roma, pero fue trasladada a la Basílica de San Pedro por ser su última misa en público. A la ceremonia también asistirán líderes de todo el mundo.
Lombardi precisó que el último encuentro del Papa con los cardenales, el jueves 28 a las 11, «no incluirá discursos, sino que será una despedida individual a cada uno de los que estén en ese momento en Roma». El santo padre prefiere tener unas palabras con cada uno en lugar de discursos.
Último vuelo a Castel Gandolfo
Benedicto XV realizará el último vuelo a Castel Gandolfo el jueves 28 a las 17:00 será despedido en el Patio de San Dámaso por el cardenal secretario de Estado, Tarcisio Bertone, y unos minutos más tarde, ya en el helipuerto, por el cardenal decano, Ángelo Sodano.
A su llegada a la residencia veraniega de Castel Gandolfo, será recibido por los responsables del Estado del Vaticano, que administra la residencia, y poco después, aproximadamente a las 18:00, se asomará al balcón que da a la plaza principal de la villa.
Desde allí impartirá un saludo y una bendición a sus «vecinos» de cada verano. Será su último acto público. Dos horas después, a las 20:00 el pontificado llega automáticamente a su fin, sin ninguna ceremonia especial. A partir de ese momento, Benedicto XVI permanecerá, según dijo, «escondido para el mundo”.
Benedicto no decidirá inicio del cónclave
El vocero del Vaticano también confirmó que no le corresponde al papa Benedicto XVI decidir el momento del inicio del cónclave de cardenales que elegirá a su sucesor.
«La fecha de inicio del cónclave será decidida por la congregación de cardenales» una vez que el Papa haya renunciado, sostuvo Lombardi.
En un principio, el Vaticano había dicho que los cardenales se reunirían alrededor del 15 de marzo, pero luego admitió que el proceso para elegir a un nuevo Papa podría adelantarse.
«Es imposible conocer de antemano la fecha antes de la decisión de la congregación de cardenales», agregó Lombardi.
Renuncia de Benedicto XVI
